Túnez
Situado al norte del continente, fue pionero en lo que dio en llamarse la primavera árabe. Antes de ello era un destino turístico de primer orden, muy cerca de Europa, y con muy buenas infraestructuras. Azotado después por algunos episodios violentos que mermaron su popularidad, va recuperando ya el lugar que merece, como enclave casi perfecto para todo tipo de viajes, desde los culturales hasta los de descanso, mientras las reformas van alcanzando, además, a todo su tejido social. Cuenta con reclamos muy atractivos, como sus bellas costas, la isla de Djerba, los oasis del sur, Mahmata, las antiguas ciudades romanas y las dunas del desierto. Y todo ello bajo la cálida acogida de una población que atesora una cultura sumamente interesante, y muy mestiza. En definitiva, es un destino magnífico para los viajeros que buscan algo de aventura sin renunciar a buenos servicios.