Eritrea
País que se separó de Etiopía pero que, lógicamente, siguió volcado al Mar Rojo. Su mitad sur está cubierta por una parte de la depresión de Danakil, y la franja costera, donde vive la inmensa mayoría de la población, está llena de maravillas por descubrir, como el golfo de Zula o las islas Dahlak, un parque nacional que es un destino de buceo realmente fascinante. Tampoco se puede dejar de citar Asmara, la capital, con sus aires y ecos italianos, o Massawa, un puerto histórico, donde los aromas islámicos ganan a los cristianos, dentro de un país en el que esas dos religiones se reparten la fidelidad, casi por igual.